Muchas personas en todo el mundo sufren de dolor de rodilla sin importar la edad que tengan. La artritis, una lesión por uso excesivo y una lesión repentina son factores importantes para el dolor en la rodilla.

Cuando sientes un dolor repentino en una de tus rodillas, significa que tu rodilla se está lesionando o se está usando en exceso, por lo que en este caso no tienes que consultar a tu médico.

En este artículo, le presentaremos una receta de un remedio natural increíble que lo ayudará a deshacerse del dolor de rodilla en poco tiempo.

Ingredientes:

  • 1-2 limones
  • aceite de sésamo

Preparación

  1. Corta los limones en trozos pequeños.
  2. Usa un paño de algodón para atar los trozos de limón.
  3. Después de eso, remoje el paño de algodón en aceite de sésamo tibio.
  4. Al final, coloque el paño sobre el área afectada y déjelo reposar durante 5 a 10 minutos.
  5. Asegúrate de repetir este tratamiento 2 veces al día, hasta que los dolores desaparezcan por completo.
  6. Otra alternativa que recomendamos encarecidamente es beber un jugo de limón diluido en un vaso de agua tibia. Asegúrese de beber esta mezcla todas las mañanas con el estómago vacío.

Como todos saben, los limones son una rica fuente de vitamina C, A, B1, B6, calcio, fósforo, potasio, bioflavonoides, ácido fólico, magnesio y pectina.

El consumo de limones puede prevenir problemas relacionados con los huesos debido a la vitamina C y el calcio que contienen. Además, te ayudarán a mantener y mejorar la salud de tus huesos.

También cabe mencionar que los limones son extremadamente beneficiosos para las articulaciones y los nervios y todo se debe a que tienen la capacidad de relajar los vasos sanguíneos y producir un efecto antiinflamatorio.

Otro ingrediente natural sorprendente es el aceite de sésamo, ya que puede penetrar a través de los tejidos hasta la médula ósea y también ingresa al torrente sanguíneo a través de los vasos circulantes y capilares.

Necesita ver al médico en caso de:

  • tiene dolor severo por la noche o cuando no está subiendo de peso su
  • la rodilla se ve deformada
  • estás enderezando tu rodilla
  • tiene enrojecimiento, calor o fiebre alrededor de la rodilla su rodilla se bloquea o hace clic dolorosamente
  • no puedes poner peso en tu rodilla en absoluto
  • el dolor no comienza a mejorar en unas pocas semanas