¿Sabías que estos alimentos que creías que eran veganos pueden no serlo?
|Alimentos que muchas veces se confunden como veganos y pueden no serlo
Si algo tienen en común los vegetarianos y veganos, además de su rechazo a productos que provienen de origen animal, es su interés por saber y conocer lo que comen.
No obstante, existen algunos alimentos que muchas veces tomamos como si fueran aptos para una dieta vegetariana cuando realmente pueden no serlo. ¿No sabes de qué alimentos te estamos hablando? Descúbrelos en la siguiente lista:
- Alimentos con aditivos
¿Te parece que estamos exagerando? No, para nada. Son muchos los alimentos que llevan aditivos de origen animal. ¿Un ejemplo? El más popular es el colorante denominado ácido carmínico o E-120, que proviene de la cochinilla, un pequeño insecto. Este aditivo de color rojizo es muy común en chuches. Existen otros ejemplos, como el aditivo E-631, un potenciador del sabor derivado de extractos de pescado o carne, o el E-161b, que puede extraerse del huevo.
- Zumos de frutas convencionales
Aunque la publicidad insista en denominarlos 100% naturales, en muchos de ellos parte de sus componentes son químicos y conservantes derivados de los ácidos grasos del tipo Omega 3, es decir, obtenidos del aceite del pescado. ¿Lo sabías?
- Ciertos cacahuetes y frutos secos
¿Un puñado de frutos secos para acompañar tu ensalada vegetariana? No vayas tan deprisa: algunos de estos productos contienen gelatina elaborada a base de pezuña del cerdo para darle un mejor sabor.
- Patatas fritas
Sí, algunas de las patatas fritas de bolsa que consumes están elaboradas con grasas de origen animal, por lo que no son aptas para tu dieta vegana.
- Pan tradicional
No todos los panes están hechos con harina, levadura, agua y sal. En muchos casos, se les agrega mantequilla, huevos, azúcar y algunas grasas.
Alimentos que sí puedes incluir en tu alimentación vegana con total confianza
Ahora que hemos comprobado que hay muchos productos de nuestra cesta de la compra cuyo origen no está tan libre de componentes animales como pensábamos, es buen momento para verificar aquellos que sí podemos incluir sin lugar a dudas en nuestra alimentación vegana. Veámoslos.
- El tofu
También conocido como queso de soja, es un producto cuyo origen es totalmente vegetal, pues se elabora a partir de la leche cuajada de este vegetal.
Este queso fresco nos ofrece una gran versatilidad de elaboraciones porque igual lo puedes condimentar para un plato dulce que salado.
- El seitán
Acabas de conocer el nombre del queso vegano, así que ahora le toca al turno a la carne vegana, el seitán, que debido a su apariencia, textura y opciones de preparación, se asemeja a la carne animal.
Entre sus ingredientes puedes encontrar la harina de trigo o la salsa de soja.
- Mantequilla de cacahuete o de maní
Puede que el término mantequilla confunda un poco, pero no es un producto derivado de la leche animal.
La puedes elaborar cómodamente en casa, empleando como ingrediente principal y único cacahuetes tostados con cáscara y una batidora.
- La quinoa
Puede que sea uno de esos ingredientes que hace poco que ha llegado a tu cocina, y por ello aún no sepas que posee un gran valor nutritivo.
La FAO nos da la clave para no renunciar a su consumo, ya que supera al resto de alimentos vegetales en contenido de proteínas y nos ofrece un sabor ligero, además de ser de fácil digestión.
Si quieres otro punto extra para sumarla a tu lista de la compra, además de ser natural si es de comercio justo, tienes la garantía de que ha sido cultivada de forma ecológica.
La quinoa es una semilla, pero es frecuente consumirla como si se tratase de un cereal. Así, puedes encontrarte con una gran variedad de semillas: de lino, de calabaza, de amapola, de girasol, de chía…
Estos pequeños alimentos han estado muchos años fuera de nuestras recetas culinarias. Sin embargo, tenemos muchas razones para incorporarlos a ellas.
- Los básicos: frutas, verduras, legumbres, cereales…
Es evidente que todos estos productos son de origen vegetal y nos permiten una gran diversidad de elaboraciones u alternativas de consumo incluyendo su ingesta en crudo, en el caso de frutas y verduras.
Además, nos encontramos que algunos de ellos, como el arroz, tienen una amplia variedad de opciones disponibles más allá del tradicional arroz blanco, como podría ser el basmati o el salvaje.
Por otro lado, la Fundación Dieta Mediterránea nos recuerda que son las frutas, hortalizas y verduras las que nos aportan la principal fuente de vitaminas, fibra y minerales, al mismo tiempo que nos proporcionan agua.
Son alimentos tan naturales y sanos, que aunque no practiquemos una alimentación vegana, ¿no crees que deberíamos consumirlos sin dudar?
Ya sabes, si quieres llevar una dieta 100% vegetal, lo mejor es que te informes antes y mires con detenimiento los ingredientes con los que están elaborados los productos que deseas consumir.
Como ves, la gran mayoría de los alimentos que adquirimos (y muchos, creyendo que son de origen vegetal) tienen algún componente relacionado con lo animal. ¡Así que no está de más investigar y conocer con mayor detalle lo que entra en tu despensa!